La quiebra es un proceso legal diseñado para ayudar a particulares y empresas a gestionar deudas abrumadoras, ofreciendo una forma de eliminarlas o reestructurarlas. Este recurso legal proporciona un "nuevo comienzo" financiero mediante la condonación o reorganización de las obligaciones bajo supervisión judicial. La gente suele recurrir a la quiebra debido a factores como la pérdida del empleo, urgencias médicas, divorcios o recesiones económicas. Sin embargo, la quiebra no está exenta de consecuencias, y conocer los distintos tipos puede ayudarle a tomar decisiones con conocimiento de causa.
Cómo funcionan las quiebras
Los procedimientos de quiebra se rigen por la legislación federal y suelen seguir los siguientes pasos:
- Presentación de una petición: El deudor presenta una petición ante un tribunal de quiebras, lo que desencadena el proceso.
- Asesoramiento crediticio: El asesoramiento obligatorio debe completarse en un plazo de 180 días desde la presentación de la solicitud.
- Suspensión automática: Esta protección ordenada por un tribunal detiene la mayoría de las acciones de los acreedores, como la ejecución hipotecaria o el embargo de salarios.
- Nombramiento de un fideicomisario: El tribunal asigna un fideicomisario para supervisar el proceso y gestionar los bienes del deudor si es necesario.
- Condonación de deudas o aprobación del plan: Dependiendo del tipo de quiebra, las deudas se cancelan o se aprueba un plan de amortización.
Los casos de quiebra suelen implicar deudas garantizadas (como las hipotecas) respaldadas por una garantía y deudas no garantizadas (como los saldos de las tarjetas de crédito) que no tienen un activo subyacente. Algunas deudas, como la manutención de los hijos o los préstamos estudiantiles, no suelen exonerarse.
Tipos de quiebras
El Código de Quiebras de EE.UU. ofrece distintos capítulos, cada uno de ellos adecuado a situaciones financieras específicas. Estos tipos se clasifican en dos grandes grupos:
- Liquidación: Capítulo 7
- Reorganización: Capítulos 11, 13, 9, 12 y 15
Desglose detallado de los capítulos de la quiebra
Quiebra del Capítulo 7: Liquidación
El Capítulo 7 es el tipo de quiebra más común para particulares y pequeñas empresas sin medios para pagar sus deudas. En este proceso, un fideicomisario vende los activos no exentos para pagar a los acreedores. Tras la liquidación, la mayoría de las deudas no garantizadas -como los saldos de las tarjetas de crédito y las facturas médicas- se cancelan, lo que permite empezar de cero.
- Requisitos: Se basa en una prueba de recursos para garantizar que los ingresos del deudor son lo suficientemente bajos.
- Limitaciones: Las deudas garantizadas, como las hipotecas, no se eliminan por completo, y algunas obligaciones, como la manutención de los hijos o los impuestos, permanecen.
Capítulo 13 Bancarrota: Plan de amortización
Diseñado para personas con ingresos regulares, el Capítulo 13 de bancarrota permite a los deudores ponerse al día en los pagos atrasados a través de un plan de amortización aprobado por el tribunal que dura de tres a cinco años. Este plan ayuda a evitar la ejecución hipotecaria mediante la reestructuración de la deuda, lo que permite a los deudores conservar sus activos.
- Requisitos: Deuda no garantizada inferior a 465.275 $ y deuda garantizada inferior a 1.395.875 $ (a partir de 2025).
- Limitación: La falta de pagos durante el plan puede resultar en el despido o la conversión al Capítulo 7.
Quiebra del Capítulo 11: Reorganización empresarial
El Capítulo 11 es utilizado principalmente por empresas y, en raras ocasiones, por particulares con altos ingresos. Este tipo permite a las empresas reestructurar sus deudas sin dejar de operar. El deudor propone un plan de reorganización para pagar a los acreedores a lo largo del tiempo.
- Ejemplo: Empresas como General Motors y Delta Airlines han recurrido al Capítulo 11 para recuperarse de crisis financieras.
- Impacto: Aunque puede ser compleja y costosa, permite a las empresas mantenerse a flote en lugar de cerrar por completo.
Capítulo 12 Quiebra: Agricultores y pescadores familiares
Este capítulo está diseñado específicamente para agricultores familiares o empresas pesqueras, ofreciéndoles una reestructuración de la deuda con más flexibilidad que el Capítulo 13. Dado el carácter estacional de estas operaciones, los calendarios de pago pueden ajustarse a los ciclos de ingresos.
- Duración: Los planes de amortización suelen durar entre 3 y 5 años.
- Impacto: Menos costoso y más rápido que el Capítulo 11.
Quiebra del Capítulo 9: Municipios
Los municipios -como ciudades, pueblos y distritos escolares- recurren al Capítulo 9 de la Ley de Quiebra para reestructurar sus deudas. Este capítulo les permite ajustar las obligaciones financieras sin liquidar activos o servicios.
- Ejemplo: Detroit se acogió al Capítulo 9 en 2013, reestructurando sus obligaciones en materia de pensiones y su deuda en bonos.
- Impacto: Los servicios municipales siguen funcionando mientras se reestructuran las deudas bajo supervisión judicial.
Capítulo 15 Quiebra: Insolvencia transfronteriza
El Capítulo 15 se ocupa de las insolvencias en las que intervienen partes de distintos países, fomentando la cooperación entre los tribunales de quiebra estadounidenses y extranjeros. Suele utilizarse cuando una entidad extranjera tiene activos u operaciones en Estados Unidos.
- Finalidad: Facilita la coordinación jurídica a través de las fronteras internacionales para gestionar eficazmente situaciones financieras complejas.
Consideraciones clave antes de declararse en quiebra
Pros
- Proporciona alivio de la deuda y detiene las gestiones de cobro.
- Ayuda a evitar ejecuciones hipotecarias y embargos.
- Ofrece un plan estructurado de reembolso o condonación de la deuda.
Cons
- Posible liquidación de activos (en el Capítulo 7).
- No todas las deudas son condonables (por ejemplo, préstamos estudiantiles, pensión alimenticia).
Alternativas a la quiebra
- Consolidación de deudas: Combinación de varias deudas en un único préstamo con pagos manejables.
- Asesoramiento crediticio: Trabajar con agencias sin ánimo de lucro para negociar con los acreedores.
- Liquidación de deudas: Negociación para pagar una cantidad reducida en satisfacción de las deudas.
Cómo elegir el tipo de quiebra adecuado
A la hora de decidir a qué capítulo de la quiebra acogerse, tenga en cuenta lo siguiente:
- Tipo y cuantía de la deuda: El Capítulo 7 es el mejor para las deudas no garantizadas, mientras que el Capítulo 13 se adapta a quienes intentan conservar su casa o su coche.
- Nivel de ingresos: Utilice el Capítulo 13 u 11 si tiene ingresos estables; el Capítulo 7 puede aplicarse si sus ingresos son bajos.
- Deuda empresarial frente a deuda personal: el Capítulo 11 funciona bien para las empresas, mientras que el Capítulo 9 se ocupa de las deudas municipales.
- Cuestiones internacionales: El Capítulo 15 puede ser apropiado para casos transfronterizos.
Es muy recomendable buscar asesoramiento jurídico para comprender los requisitos de elegibilidad y las consecuencias de cada capítulo.
¿Es la quiebra la opción adecuada para usted?
Declararse en quiebra es una decisión financiera importante, pero puede ofrecer un nuevo comienzo muy necesario. Es importante sopesar el impacto a largo plazo sobre el crédito y la capacidad de endeudamiento futuro frente a los beneficios inmediatos del alivio de la deuda.
Si sus dificultades financieras parecen insuperables y no prevé una mejora en un futuro próximo, la quiebra puede ser una opción viable. Sin embargo, es esencial explorar alternativas y consultar con un asesor financiero o un abogado especializado en quiebras para tomar la mejor decisión en función de sus circunstancias.