La deuda médica es un problema que afecta a millones de personas en Estados Unidos, incluso a quienes tienen seguro. Entre los elevados gastos de bolsillo y las confusas facturas médicas, es fácil sentirse abrumado. Una sola visita a urgencias o un procedimiento inesperado pueden dejarle con una factura difícil de gestionar, sobre todo si ya tiene un presupuesto ajustado.
Si tiene problemas con las deudas médicas, no está solo. La buena noticia es que hay formas de afrontarlo. Desde programas gubernamentales hasta asistencia hospitalaria y apoyo sin ánimo de lucro, existen recursos que pueden ayudarle a reducir sus costes y a elaborar un plan para seguir adelante.
Por qué se producen las deudas médicas
Gastos médicos elevados
La sanidad en Estados Unidos es cara, y los precios siguen subiendo. Incluso con seguro, una hospitalización o una visita a un especialista pueden costar miles de dólares. Las personas sin seguro suelen tener que hacer frente a facturas aún más elevadas.
Lagunas del seguro y facturas inesperadas
Muchas personas tienen planes con franquicias elevadas o cobertura limitada. Esto significa que incluso la atención sanitaria rutinaria puede conllevar grandes desembolsos. Además, si el médico o el hospital resultan estar fuera de la red, puedes recibir una factura sorpresa, aunque no lo supieras en ese momento.
Cargos confusos o sorpresa
Las facturas médicas pueden ser difíciles de entender. Pueden incluir cargos que no esperabas o servicios que parecen poco claros. Los errores en las facturas son frecuentes, y algunas personas acaban debiendo dinero por cosas que en realidad no recibieron. Estas sorpresas pueden llevarle a endeudarse antes incluso de darse cuenta de lo ocurrido.
Dónde encontrar ayuda para deudas médicas
Solicitar programas sanitarios gubernamentales
Si sus ingresos son limitados, puede optar a programas que reducen o cubren los gastos médicos.
Cómo solicitarlo
- Vaya a Healthcare.gov y utilice la herramienta de selección para ver si reúne los requisitos para Medicaid, Medicare o CHIP.
- También puede solicitarlo directamente a través del sitio web de Medicaid de su estado.
- Esté preparado para proporcionar pruebas de ingresos, edad, tamaño de la unidad familiar y cualquier gasto médico actual.
Pregunte a su hospital por las ayudas económicas
La mayoría de los hospitales sin ánimo de lucro están obligados por ley a ofrecer programas de asistencia caritativa o ayuda económica.
Pasos a seguir
- Llame al departamento de facturación del hospital y pregunte: "¿Ofrecen un programa de asistencia financiera o de cuidados caritativos?".
- Solicite un formulario de solicitud e instrucciones.
- Presenta un justificante de ingresos (como una declaración de la renta reciente o un talón de la nómina) y cualquier factura médica para la que necesites ayuda.
Incluso si ya ha recibido una factura o se ha cobrado, es posible que cumpla los requisitos, por lo que vale la pena preguntar.
Recurrir a organizaciones sin ánimo de lucro que reduzcan o condonen deudas médicas
Algunas organizaciones trabajan directamente con los pacientes o compran deudas médicas a los cobradores para poder borrarlas.
Recursos para probar
- Dólar para le ayuda a solicitar atención hospitalaria de beneficencia presentando la documentación por usted.
- RIP Deuda Médica compra grandes cantidades de deudas médicas y las condona. Consulta su sitio web para ver si están activos en tu zona.
Estos servicios son gratuitos. No es necesario pagar para obtener ayuda de estas organizaciones sin ánimo de lucro.
Consulte los programas de ayuda locales o estatales
Algunas administraciones locales se asocian con hospitales u organizaciones sin ánimo de lucro para ofrecer una reducción específica de la deuda.
Cómo encontrarlos
- Llame al 2-1-1 o visite 211.org para hablar con alguien que pueda orientarle sobre la ayuda local.
- Busque en el sitio web del departamento de sanidad de su ciudad o estado términos como "alivio de la deuda médica", "atención caritativa" o "asistencia financiera".
Consejos para gestionar las facturas médicas
Revisión de errores
Empiece por pedir una factura detallada para poder ver todos los cargos. Fíjese bien si hay errores, como cargos duplicados, servicios incorrectos o tasas que debería haber cubierto su seguro. Si algo no cuadra, llame a la oficina de facturación y pida un desglose. También puede ponerse en contacto con su compañía de seguros para que le aclaren lo que estaba (o no) cubierto.
Negociar el importe
Si el total es superior a lo que puedes pagar, intenta negociar. Llama al departamento de facturación del proveedor y explícale tu situación. Pregunta si ofrecen descuentos por dificultades económicas o si pueden reducir la cantidad que debes. Prepárate para presentar un justificante de ingresos si es necesario.
Establecer un plan de pagos
La mayoría de los hospitales y clínicas están dispuestos a crear un plan de pagos mensuales, a menudo sin intereses. Solicite un acuerdo por escrito que indique el importe de su pago mensual y su duración. Esto puede ayudarle a evitar los cobros mientras se mantiene al corriente de la factura.
Cuidado con las tarjetas de crédito médicas
Algunos proveedores ofrecen tarjetas de crédito especiales para facturas médicas. Al principio pueden tener un interés del 0%, pero los intereses pueden subir si no se paga el saldo a tiempo. Considera esta opción sólo si has revisado las condiciones y estás seguro de poder pagarla antes de que empiecen los intereses.
Evitar futuras deudas médicas
Sepa qué cubre su seguro
Conocer su plan de seguro médico puede ayudarle a evitar facturas inesperadas. Averigüe cuál es su franquicia, cuánto pagará en concepto de copagos y si están cubiertos determinados servicios, como las visitas de urgencia o a especialistas. Siempre que sea posible, elija proveedores de la red para reducir costes.
Si algo no está claro, llame a su compañía de seguros y pregunte. Es mejor hacer preguntas antes del tratamiento que verse sorprendido por una factura más tarde.
Recurra a la atención urgente cuando no sea una emergencia
Si necesitas atención médica, pero tu vida no corre peligro, considera la posibilidad de acudir a una clínica de urgencias en lugar de a urgencias. Suele ser mucho más barato y muchas clínicas aceptan seguros. Llama antes o consulta en internet para confirmar qué tratan y cuánto cobran.
Crear un pequeño fondo de emergencia
Tener unos ahorros reservados -incluso unos cientos de dólares- puede suponer una gran diferencia si te llega una factura por sorpresa. Intente ahorrar un poco cada mes, aunque sólo sean 10 ó 20 dólares. Con el tiempo, conseguirá un colchón que le ayudará a cubrir futuros gastos médicos.
Reflexiones finales
Las deudas médicas pueden resultar abrumadoras, pero no tiene por qué afrontarlas solo. Tanto si se trata de una nueva factura como de una que ya está en proceso de cobro, hay medidas que puede tomar para reducir la presión.
Empiece por revisar sus facturas en busca de errores y póngase en contacto con el proveedor para preguntarle por descuentos o planes de pago. Busque programas gubernamentales, asistencia hospitalaria o servicios sin ánimo de lucro que puedan ayudarle a reducir o incluso condonar su deuda. Y si te sientes estancado, un asesor financiero puede ayudarte a entender tus opciones y a elaborar un plan.
Tomar medidas, aunque sean pequeñas, puede ayudarle a recuperar la sensación de control y empezar a avanzar.